¿DÓNDE ESTÁ PAULA?
Paula Perassi: 10 años de una desaparición que marcó a la región de San Lorenzo.
¿Dónde Está Paula? es una serie podcast sobre la historia de Paula Perassi, una mujer de 33 años, embarazada, que desapareció el 18 de septiembre de 2011 en San Lorenzo.
En este podcast están las voces de las y los protagonistas de un caso que puso de manifiesto el entramado de poder y corrupción en pleno Cordón Industrial del sur de la provincia de Santa Fe, Argentina.
El trabajo recibió la declaración de Interés Municipal por parte del Concejo de la ciudad de Rosario, de Interés Provincial por la Cámara de Diputados de Santa Fe y también fue declarado de interés por la Cámara de Senadores de la provincia de Santa Fe.
La primera temporada cuenta con cinco episodios y este 2022 se emitirá la segunda temporada que continuará recorriendo más de diez años de investigación.
En este podcast están las voces de las y los protagonistas de un caso que puso de manifiesto el entramado de poder y corrupción en pleno Cordón Industrial del sur de la provincia de Santa Fe, Argentina.
El trabajo recibió la declaración de Interés Municipal por parte del Concejo de la ciudad de Rosario, de Interés Provincial por la Cámara de Diputados de Santa Fe y también fue declarado de interés por la Cámara de Senadores de la provincia de Santa Fe.
La primera temporada cuenta con cinco episodios y este 2022 se emitirá la segunda temporada que continuará recorriendo más de diez años de investigación.
La historia del caso
Desde hace 10 años en San Lorenzo -una ciudad de 50 mil habitantes del la provincia de Santa Fe, ubicada en el centro de la Argentina- una mujer embarazada está desaparecida.
El domingo 18 de septiembre de 2011 a las 20.46 Paula Perassi recibió un llamado en su celular, habló 31 segundos, cortó, salió de su casa y nunca regresó. |
Lo único que se sabe de esa última escena en su domicilio de calle Entre Ríos 799, en pleno centro de la ciudad, es lo que declaró su concubino Rodolfo Ortiz de Elguea: que esa noche después de cenar con sus dos hijos, Lucas de 6 años y Agustín de 2, Paula le dijo que iba a buscar la tarea escolar de uno de los chicos a la casa de una mujer llamada Natalia, agarró una cartera pequeña en la que llevaba solo las llaves y se fue. Una hora después, a las 22, Alicia, la madre de Paula la llamó y el celular ya estaba apagado.
Paula tenía 33 años y convivía con Rodolfo, el padre de sus hijos, pero estaban separados desde hacía algunos meses y dormían en distintas habitaciones. Cuando Rodolfo se despertó a la madrugada vio que las ventanas del comedor estaban levantadas y nadie las había bajado, buscó a Paula en la habitación de Lucas, pero ella no estaba.
Según declaró en el juicio que se hizo en 2019, llamó al celular de Paula insistentemente y como no atendió, también llamó al hospital para ver si había habido algún accidente y a la policía.
Paula tenía 33 años y convivía con Rodolfo, el padre de sus hijos, pero estaban separados desde hacía algunos meses y dormían en distintas habitaciones. Cuando Rodolfo se despertó a la madrugada vio que las ventanas del comedor estaban levantadas y nadie las había bajado, buscó a Paula en la habitación de Lucas, pero ella no estaba.
Según declaró en el juicio que se hizo en 2019, llamó al celular de Paula insistentemente y como no atendió, también llamó al hospital para ver si había habido algún accidente y a la policía.
Llamó a Paula aproximadamente cada 5 minutos desde las 4 de la madrugada de ese lunes 19 de septiembre y así lo hizo durante todo el día. A la tarde, cuando la familia vio que Paula no volvía para ir a buscar a su hijo a la escuela como hacía todos los días, decidió hacer la denuncia.
En la madrugada del 20 de septiembre, un amigo de la familia Perassi, Gabriel Strumia le dijo a Alberto, el padre de Paula, que había recibido un mensaje que sería de ella y decía: “Desde hoy estoy sola. Nadie más me molesta. Perdón, sos muy bueno. Estoy llegando a San Juan. Porfi no lo comentes”. |
Ese mensaje no estaba firmado y tampoco llegó desde el número de celular de Paula, sino de otro número que la familia no conocía y luego se supo que era un teléfono que Paula usaba para comunicarse con Strumia.
A los dos días de la desaparición, Alberto, pidió el listado de llamadas del teléfono de su hija y allí la policía encontró que en las últimas semanas la joven tenía una gran cantidad de llamadas con el amigo de su padre, Gabriel Strumia.
Así, Strumia se convirtió en el primer demorado por la causa, fue interrogado por la policía y liberado a las 24 horas por orden del juez de instrucción de San Lorenzo, Eduardo Filocco, por no encontrar pruebas.
En esos primeros días, se estableció que el llamado que hizo salir a Paula de su casa se realizó desde un locutorio, o cabina telefónica, ubicado a la vuelta de su casa. Cuando la policía llegó al lugar para ver si había cámaras de seguridad y así identificar a quién la había llamado, ya era tarde: las cámaras de seguridad se borraban al quinto día y fueron el día 11.
Así comenzó un largo camino en el que la investigación no avanzaba, donde Alberto Perassi comenzó a ser la cara visible de la lucha por saber qué pasó con su hija, con un juez que dijo que “Paula era una loquita que ya iba a volver” y una desaparición que seguía figurando en la Justicia como “solicitud de paradero”, como si se hubiera ido por su propia voluntad. Ante la falta de respuestas Alberto decidió encadenarse en los tribunales sanlorencinos y lo hizo varias veces.
A los dos días de la desaparición, Alberto, pidió el listado de llamadas del teléfono de su hija y allí la policía encontró que en las últimas semanas la joven tenía una gran cantidad de llamadas con el amigo de su padre, Gabriel Strumia.
Así, Strumia se convirtió en el primer demorado por la causa, fue interrogado por la policía y liberado a las 24 horas por orden del juez de instrucción de San Lorenzo, Eduardo Filocco, por no encontrar pruebas.
En esos primeros días, se estableció que el llamado que hizo salir a Paula de su casa se realizó desde un locutorio, o cabina telefónica, ubicado a la vuelta de su casa. Cuando la policía llegó al lugar para ver si había cámaras de seguridad y así identificar a quién la había llamado, ya era tarde: las cámaras de seguridad se borraban al quinto día y fueron el día 11.
Así comenzó un largo camino en el que la investigación no avanzaba, donde Alberto Perassi comenzó a ser la cara visible de la lucha por saber qué pasó con su hija, con un juez que dijo que “Paula era una loquita que ya iba a volver” y una desaparición que seguía figurando en la Justicia como “solicitud de paradero”, como si se hubiera ido por su propia voluntad. Ante la falta de respuestas Alberto decidió encadenarse en los tribunales sanlorencinos y lo hizo varias veces.
Detenciones
A fines de 2012, un año después, quedó detenido Gabriel Strumia. Esto fue a partir de que se valoraran los chats que Paula mantenía vía Facebook con un hombre de General Rodríguez, provincia de Buenos Aires que era amigo de Strumia, llamado José Luis Freijomil. Paula le contó días antes de desaparecer que estaba embarazada, que ese hijo era de Strumia, con quien mantenían una relación sentimental y que el hombre pretendía que ella abortara, pero ella no quería, porque tenía miedo.
Por esos chats y por las miles de llamadas que hubo entre Paula y Strumia las semanas antes a la desaparición, el hombre quedó detenido en septiembre de 2012 e imputado por homicidio. A la semana, quedó detenido un empleado suyo y mano derecha, Darío Antonio Díaz, porque hubo testigos que declararon que la tarde que desapareció Paula vieron a los dos hombres en un bar de una localidad vecina, Timbúes. Pero en diciembre de ese año, tres meses después, ambos quedaron en libertad. |
La causa permaneció paralizada, Alberto Perassi recibió amenazas, debió usar chaleco antibalas y tener seguridad privada en la puerta de su casa y hubo movilizaciones que cada vez se hicieron más multitudinarias, la sociedad de San Lorenzo y toda la región comenzó a hacerse eco del reclamo y cada vez más organizaciones acompañaban a la familia.
Recién tres años y medio después hubo novedades, con una hipótesis que decía que a Paula le habían hecho un aborto contra su voluntad y que en esa práctica había muerto, en abril de 2015 quedaron detenidas 9 personas, que son las que llegaron a juicio en 2019.
Se trata de Gabriel Strumia, principal sospechoso por mantener un vínculo sentimental con Paula; su esposa, Roxana Michl; Mirta Rusñisky, acusada de realizar el aborto; Darío Antonio Díaz, empleado de Strumia; y los cinco policías de la Unidad Regional XVII acusados de entorpecer la investigación: el Jefe de Agrupación Cuerpos, Daniel Puyol; El jefe de Agrupación de Unidades Especiales, Jorge Krenz y los oficiales Gabriel Godoy, Aldo Gómez y María José Galtelli.
Recién tres años y medio después hubo novedades, con una hipótesis que decía que a Paula le habían hecho un aborto contra su voluntad y que en esa práctica había muerto, en abril de 2015 quedaron detenidas 9 personas, que son las que llegaron a juicio en 2019.
Se trata de Gabriel Strumia, principal sospechoso por mantener un vínculo sentimental con Paula; su esposa, Roxana Michl; Mirta Rusñisky, acusada de realizar el aborto; Darío Antonio Díaz, empleado de Strumia; y los cinco policías de la Unidad Regional XVII acusados de entorpecer la investigación: el Jefe de Agrupación Cuerpos, Daniel Puyol; El jefe de Agrupación de Unidades Especiales, Jorge Krenz y los oficiales Gabriel Godoy, Aldo Gómez y María José Galtelli.
Todos ellos llegaron al juicio detenidos, los civiles en la cárcel y los policías con prisión domiciliaria. La causa fue caratulada como "privación ilegítima de la libertad agravada, aborto sin consentimiento seguido de muerte”. Además, a raíz de lo ocurrido durante la investigación policial, se completó la caratula con “falsedad ideológica de instrumento público y encubrimiento agravado”.
El extenso juicio se realizó en el Centro de Justicia Penal de Rosario entre marzo y abril de 2019, declararon 72 testigos y el Tribunal presidido por la jueza Griselda Strólogo, Mariel Minetti y Álvaro Campos, dejó a todos en libertad en un fallo que fue masivamente repudiado por la familia y las organizaciones sociales que salieron espontáneamente a las calles de San Lorenzo a abrazar a Alberto y Alicia, los padres de Paula y a exigir justicia.
Esa controvertida sentencia fue revisada en noviembre de 2019 por los camaristas Gustavo Salvador, Javier Beltramone y Carolina Hernández, quienes mantuvieron las absoluciones de siete de los acusados y condenaron a dos de ellos: a 17 años de cárcel a Strumia y a 7 a Michl por el delito de privación ilegítima de la libertad coactiva por tratarse de una mujer embarazada.
El extenso juicio se realizó en el Centro de Justicia Penal de Rosario entre marzo y abril de 2019, declararon 72 testigos y el Tribunal presidido por la jueza Griselda Strólogo, Mariel Minetti y Álvaro Campos, dejó a todos en libertad en un fallo que fue masivamente repudiado por la familia y las organizaciones sociales que salieron espontáneamente a las calles de San Lorenzo a abrazar a Alberto y Alicia, los padres de Paula y a exigir justicia.
Esa controvertida sentencia fue revisada en noviembre de 2019 por los camaristas Gustavo Salvador, Javier Beltramone y Carolina Hernández, quienes mantuvieron las absoluciones de siete de los acusados y condenaron a dos de ellos: a 17 años de cárcel a Strumia y a 7 a Michl por el delito de privación ilegítima de la libertad coactiva por tratarse de una mujer embarazada.
Ambos continuaron en libertad por no estar firme el fallo, hasta que, en 2020, en plena pandemia, se revisaron las condenas y los camaristas Bibiana Alonso, Gabriela Sansó y José Luis Mascali confirmaron las condenas para ambos y ordenaron la prisión inmediata.
Por eso, el matrimonio que pasó todas las instancias de juicio tomados de la mano está en la cárcel desde el 30 de diciembre de 2020. En febrero de 2022, Roxana Michl quedó en libertad condicional, debido a que se cumplieron las dos terceras partes de su condena.
Por eso, el matrimonio que pasó todas las instancias de juicio tomados de la mano está en la cárcel desde el 30 de diciembre de 2020. En febrero de 2022, Roxana Michl quedó en libertad condicional, debido a que se cumplieron las dos terceras partes de su condena.
Búsqueda
El primer encargado de las búsquedas fue el propio Alberto Perassi, quien salió muchas veces en soledad atrás de alguna pista o teoría. Recorrió calles, campos, fue por el río para ver si Paula estaba abajo de una barranca, rompió a mazazos un tambor lleno de cemento, buscó, buscó y nada.
Luego se sumó un pilar fundamental en la búsqueda, Juan Nóbile, quien es integrante del Equipo Argentino de Antropología Forense, es reconocido por dedicarse a la búsqueda de personas desaparecidas en todo el mundo y participa de la búsqueda de Paula cada vez que hay un indicio. |
Fue él el encargado de dirigir los trabajos realizados en una cava en Puerto General San Martín, en el límite con Timbúes, donde en 2015, durante más de 6 meses, se realizaron excavaciones para saber si allí habían tirado el cuerpo de Paula.
Los resultados fueron negativos. También trabajó en otros predios donde la buscó con diferentes tecnologías y la última búsqueda grande fue en un campo en Luis Palacios, donde un testigo declaró que la podrían haber escondido. Allí tampoco se encontró nada.
Los resultados fueron negativos. También trabajó en otros predios donde la buscó con diferentes tecnologías y la última búsqueda grande fue en un campo en Luis Palacios, donde un testigo declaró que la podrían haber escondido. Allí tampoco se encontró nada.
Palabras de padre y madre
Alicia y Alberto, padres de Paula y símbolos de la lucha en reclamo de justicia. Cuando se le pregunta a Alberto qué significa para él que haya justicia dice: “encontrar los huesos de Paula, ahí va a haber justicia. Ahora hay dos personas presas, pero no sabemos lo que pasó, dónde está el cuerpo, sí sabemos quiénes fueron porque no están presos porque sí, están presos porque son ellos”. Alicia, hizo una reflexión sobre el décimo aniversario que se cumplió en 2021 y una súplica: “estamos en el 2021 estamos como si fuera el primer día, sin saber dónde está ella, qué hicieron con ella. Lo único que me gustaría antes de morirme es saber qué hicieron con mi hija, que me digan, qué hicieron, en qué lugar está, para poderme ir tranquila sabiendo dónde está mi hija”. |
Puesta en escena
Fue él el encargado de dirigir los trabajos realizados en una cava en Puerto General San Martín, en el límite con Timbúes, donde en 2015, durante más deEste podcast cuenta con presentaciones en vivo en diferentes teatros y espacios culturales que se desarrollan dentro de lo que se llama Periodismo Performático, donde se hace una puesta en escena, con narración en vivo de los episodios, la banda sonora que realizó la musicalización original tocando en el lugar y actores representando textos, todo con rigor periodístico, dentro de la no-ficción. 6 meses, se realizaron excavaciones para saber si allí habían tirado el cuerpo de Paula.
Los resultados fueron negativos. También trabajó en otros predios donde la buscó con diferentes tecnologías y la última búsqueda grande fue en un campo en Luis Palacios, donde un testigo declaró que la podrían haber escondido. Allí tampoco se encontró nada.
Los resultados fueron negativos. También trabajó en otros predios donde la buscó con diferentes tecnologías y la última búsqueda grande fue en un campo en Luis Palacios, donde un testigo declaró que la podrían haber escondido. Allí tampoco se encontró nada.
Episodio 1: Una desaparecida
El 18 de septiembre de 2011 Paula Perassi salió de su casa en la ciudad de San Lorenzo, en el sur de la provincia de Santa Fe, Argentina, y no volvió. Su concubino declaró que lo último que ella le dijo es que iba a buscar la tarea escolar de uno de sus hijos. La familia se entera de la noticia y empieza a pensar posibilidades sobre dónde pudo haber ido.
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Episodio 2: La fotografía
Alberto Perassi fue a la casa de su amigo Gabriel Strumia para preguntarle una dirección donde pudo haber ido su hija, pero ahí nunca llegó. Paula sigue sin regresar. El amigo de Alberto les alcanza una foto muy particular para que hagan la denuncia. Llega un mensaje enigmático y la policía empieza a investigar. Descubren algo muy específico que Paula buscó en Internet.
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Episodio 4: El locutorio
La desaparición de Paula Perassi es investigada como una "averiguación de paradero". Después de confirmar que estaba embarazada al momento de desaparecer, continúan las tareas para saber quién hizo la última llamada que ella atendió. Comienzan a aparecer interrogantes sobre el accionar de la policía y la justicia.
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Equipo de producción:
Producción, investigación, dirección, entrevistas y guión: Flavia Campeis y Hagar Blau Makaroff
Asesores de guión: José Matteucci y Martin Parodi. Narradora: Flavia Campeis. Edición de sonido: Francisco Matteucci. Música original: Julieta Sciasci, José y Francisco Matteucci. |