ARGENTINA
¿LA MOTOSIERRA DE MILEI TAMBIÉN PASA POR AMÉRICA LATINA?
ASÍ HAN SIDO LOS ATAQUES VERBALES
DEL PRESIDENTE ARGENTINO A OTROS PAÍSES
ASÍ HAN SIDO LOS ATAQUES VERBALES
DEL PRESIDENTE ARGENTINO A OTROS PAÍSES
Por: Flavia Campeis – Jorgelina Tomasin (*)
Integrantes HUMANOS
Desde la llegada de Javier Milei como presidente de Argentina en diciembre de 2023, el posicionamiento del país en materia de política exterior ha cambiado rotundamente. Desde Lula, pasando por Boric y hasta Petro, el presidente argentino ha realizado polémicas declaraciones que ponen en jaque la continuidad de vínculos comerciales importantes y el proyecto de integración latinoamericana. ¿Cómo se configura el mapa en Latinoamérica con Milei en Argentina? ¿Tiene este país riesgos de quedarse en soledad o encontrará algunos aliados externos?
La motosierra, la herramienta Milei levantaba durante su campaña presidencial para anunciar que recortaría diversas áreas del Estado, el gasto público y quitarle privilegios a lo que él llama “la casta política”, ¿también pasará por el vínculo con América Latina?
Sus disputas transnacionales comenzaron mucho antes de ser elegido cuando llamó “comunista y corrupto” al presidente de Lula Da Silva e invitó al expresidente Jair Bolsonaro a su posesión diciendo que para él “sería un honor enorme, sería algo hermoso”. A pesar de que Brasil es el principal socio comercial de Argentina, Milei nunca se mostró interesado en sostener ese vínculo. El nombramiento del peronista Daniel Scioli como Secretario de Turismo, Ambiente y Deporte de la Nación dejó acéfala la Embajada en Brasilia, y Argentina solo cuenta con consulados para la representación diplomática.
De otro lado, respecto al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuando el mandatario manifestó su apoyo al entonces candidato presidencial por Colombia, Gustavo Petro, Milei dijo: “lo de López Obrador es verdaderamente patético, lamentable, repugnante” y consideró que su gestión económica, social y cultural era un fracaso.
En cuanto al presidente de Chile, Gabriel Boric, Milei indicó en una entrevista a un medio de ese país dos meses antes de convertirse en presidente, que sería bueno que los chilenos pudieran sacarse de encima al “empobrecedor de Boric”. Sin embargo, el mandatario chileno asistió a la asunción de Milei el 10 de diciembre de 2023 y señaló: “más allá de las públicas y conocidas diferencias que pueda tener con el presidente Milei, deseo por el bien del pueblo argentino que tenga una buena gestión”. Un mes después, en una entrevista Milei volvió a referirse a Boric diciendo que “es alguien que tiene las ideas incorrectas”.
Asimismo, en un reportaje con un medio colombiano, Milei calificó al Presidente Gustavo Petro de “comunista asesino”. Luego, en un encuentro en Estados Unidos en febrero pasado, en el marco de la Conferencia Política de Acción Conservadora, Milei dijo que Petro era “una plaga letal” para los colombianos.
A los pocos días de asumir, el gobierno argentino anunció que no designaría nuevos embajadores en Cuba, Nicaragua y Venezuela, donde la administración del anterior presidente Alberto Fernández había efectuado nombramientos políticos. La diplomacia no es un recurso que Milei crea necesario para manejar las relaciones con otros Estados.
Además, la ministra de Relaciones Exteriores, Diana Mondino, dijo en una entrevista televisiva –pruebas ni denuncias– que en Argentina había “infiltrados de Cuba y Venezuela” con propósitos desestabilizadores.
En la campaña a presidente, en una entrevista a un medio estadounidense, Javier Milei aseguró: “Creo que hay que eliminar el Mercosur porque es una unión aduanera defectuosa que perjudica a los argentinos de bien”.
El Mercosur es un bloque comercial que funciona desde 1991. El actual gobierno intenta reflotar el acuerdo con la Unión Europea, con el cual países como Francia están en total desacuerdo.
Integrantes HUMANOS
Desde la llegada de Javier Milei como presidente de Argentina en diciembre de 2023, el posicionamiento del país en materia de política exterior ha cambiado rotundamente. Desde Lula, pasando por Boric y hasta Petro, el presidente argentino ha realizado polémicas declaraciones que ponen en jaque la continuidad de vínculos comerciales importantes y el proyecto de integración latinoamericana. ¿Cómo se configura el mapa en Latinoamérica con Milei en Argentina? ¿Tiene este país riesgos de quedarse en soledad o encontrará algunos aliados externos?
La motosierra, la herramienta Milei levantaba durante su campaña presidencial para anunciar que recortaría diversas áreas del Estado, el gasto público y quitarle privilegios a lo que él llama “la casta política”, ¿también pasará por el vínculo con América Latina?
Sus disputas transnacionales comenzaron mucho antes de ser elegido cuando llamó “comunista y corrupto” al presidente de Lula Da Silva e invitó al expresidente Jair Bolsonaro a su posesión diciendo que para él “sería un honor enorme, sería algo hermoso”. A pesar de que Brasil es el principal socio comercial de Argentina, Milei nunca se mostró interesado en sostener ese vínculo. El nombramiento del peronista Daniel Scioli como Secretario de Turismo, Ambiente y Deporte de la Nación dejó acéfala la Embajada en Brasilia, y Argentina solo cuenta con consulados para la representación diplomática.
De otro lado, respecto al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuando el mandatario manifestó su apoyo al entonces candidato presidencial por Colombia, Gustavo Petro, Milei dijo: “lo de López Obrador es verdaderamente patético, lamentable, repugnante” y consideró que su gestión económica, social y cultural era un fracaso.
En cuanto al presidente de Chile, Gabriel Boric, Milei indicó en una entrevista a un medio de ese país dos meses antes de convertirse en presidente, que sería bueno que los chilenos pudieran sacarse de encima al “empobrecedor de Boric”. Sin embargo, el mandatario chileno asistió a la asunción de Milei el 10 de diciembre de 2023 y señaló: “más allá de las públicas y conocidas diferencias que pueda tener con el presidente Milei, deseo por el bien del pueblo argentino que tenga una buena gestión”. Un mes después, en una entrevista Milei volvió a referirse a Boric diciendo que “es alguien que tiene las ideas incorrectas”.
Asimismo, en un reportaje con un medio colombiano, Milei calificó al Presidente Gustavo Petro de “comunista asesino”. Luego, en un encuentro en Estados Unidos en febrero pasado, en el marco de la Conferencia Política de Acción Conservadora, Milei dijo que Petro era “una plaga letal” para los colombianos.
A los pocos días de asumir, el gobierno argentino anunció que no designaría nuevos embajadores en Cuba, Nicaragua y Venezuela, donde la administración del anterior presidente Alberto Fernández había efectuado nombramientos políticos. La diplomacia no es un recurso que Milei crea necesario para manejar las relaciones con otros Estados.
Además, la ministra de Relaciones Exteriores, Diana Mondino, dijo en una entrevista televisiva –pruebas ni denuncias– que en Argentina había “infiltrados de Cuba y Venezuela” con propósitos desestabilizadores.
En la campaña a presidente, en una entrevista a un medio estadounidense, Javier Milei aseguró: “Creo que hay que eliminar el Mercosur porque es una unión aduanera defectuosa que perjudica a los argentinos de bien”.
El Mercosur es un bloque comercial que funciona desde 1991. El actual gobierno intenta reflotar el acuerdo con la Unión Europea, con el cual países como Francia están en total desacuerdo.
Posesión del presidente Javier Milei el 10 de diciembre de 2023
Foto tomada página Casa Rosada
Foto tomada página Casa Rosada
“AFUERA” LATINOAMÉRICA
“Afuera” es una de las palabras más usadas por el gobierno de “La Libertad Avanza”, es la palabra que usaba Milei en campaña para decir que eliminaría la mayoría de los Ministerios, cosa que ha cumplido. El mismo análisis se puede hacer de su vínculo con gobiernos progresistas de América Latina, ya que en todas las oportunidades que se presentan para hablar de la política exterior tanto el presidente y como la canciller han insistido en que la alineación geopolítica del gobierno es con Estados Unidos e Israel y contra los gobiernos que consideran de izquierda, comunistas o populares.
UN GOBIERNO CON “SOBRECARGA IDEOLÓGICA”
El especialista en política internacional Santiago Toffoli analiza este panorama y asegura que “la sobrecarga ideológica del gobierno hasta la fecha muestra que, en realidad, prevalece un perfil dogmático”.
El licenciado en Relaciones Internacionales explicó que lo que marca la gestión del gobierno de Javier Milei en términos de política exterior es una profunda ideologización de las relaciones exteriores. Desde su posesión el 10 de diciembre hay una serie de decisiones que se toman a partir de cuestiones ideológicas.
La primera que fue anunciada en campaña fue el rechazo a sumarse a la alianza de los Bricks (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), donde Argentina hubiera tenido la oportunidad de encontrar nuevos socios en materia de inversiones en energía” y agregó: “esta es una primera señal de cómo el gobierno de Milei, por no aceptar una un patrón de vinculación que se abriera de los intereses de Occidente, dejó pasar una oportunidad importante para relacionarse con otros con otros países”.
Toffoli analizó también que “algunas cuestiones que tienen que ver con la puesta en riesgo de dos de las relaciones más importantes y estratégicas que tiene Argentina, una con Brasil y otra con China, las primeras decisiones concretas fueron también en consonancia con esta ideologización extrema de las Relaciones Exteriores”. En cuanto a Brasil, Toffoli explicó que "hoy lo concreto es que Argentina no tiene embajador en Brasil, no tenemos un representante más que los cónsules y por otro lado lo que tiene que ver con lo simbólico, Milei invitó a su asunción a Jair Bolsonaro y no a Lula da Silva”.
El analista explicó que “lo mismo pasa con China, sucedió algo muy extraño. Argentina que hoy por hoy tiene en China su principal socio comercial, tuvo una visita de Agustín Romo, que es una persona cercana al presidente Milei, a la oficina de Comercio de Taiwán en donde se le donó Argentina 300 cajas navideñas y a partir de eso China volvió a exigir el pago por el Swap de monedas que había cerrado con el gobierno de Alberto Fernández hacia fines de su gestión. La restricción externa, las relaciones comerciales y la oportunidad es de inversiones y de posibles nuevos mercados, se ven se ven muy condicionados por esto posicionamientos puramente ideológicos porque relacionarse o acercarse a Taiwán no puede tener ningún tipo de beneficio para la Argentina, de hecho China no es un actor que mida sus relaciones en cuanto a lo comercial o incluso a lo político por cuestiones ideológicas”.
“Teniendo en cuenta las dificultades macroeconómicas que tiene Argentina que están muy determinadas por la restricción externa y por el frente externo, todas estas decisiones también van aportando a que las herramientas cada vez sean menos en materia de política exterior para poder subsanar esa situación”, valoró Toffoli.
En el caso de Colombia, Toffoli explicó que Milei “de la nada llamó comunista y asesino a otro jefe de Estado, Gustavo Petro, creo que eso daña la relación bilateral”.
En cuanto a Uruguay Milei le cedió que pueda dragar el canal de Magdalena que es el que entra al puerto Montevideo, que era una disputa sobre las aguas territoriales compartidas y ahora el puerto de Montevideo tiene muchísimas más ventajas comerciales en términos logísticos que los puertos argentinos.
Por otro lado, en cuanto a la situación de violencia que atraviesa Ecuador, recordó que “la canciller Diana Mondino llamó a los a los narcotraficantes como terroristas socialistas, volviendo a poner el tema ideológico en una cuestión de seguridad que poco tienen que ver quizá con la ideología y los grupos ligados al crimen organizado no tienen una reivindicación política como sí podía pasar en otros momentos de la historia en otros países, pero en Ecuador no pasa esto”.
“Entonces creo que si el gobierno sigue en esta línea de ideologizar al extremo sus vínculos con los otros países, no solamente se ven lesionados los intereses argentinos, sino que también va a poder aportar poco Argentina en lo que tiene que ver con la resolución de los problemas comunes y esto conduciría a un aislamiento Argentina en términos de integración latinoamericana en pos de alinearse a Israel y a Estados Unidos”.
El licenciado en Relaciones Internacionales explicó que lo que marca la gestión del gobierno de Javier Milei en términos de política exterior es una profunda ideologización de las relaciones exteriores. Desde su posesión el 10 de diciembre hay una serie de decisiones que se toman a partir de cuestiones ideológicas.
La primera que fue anunciada en campaña fue el rechazo a sumarse a la alianza de los Bricks (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), donde Argentina hubiera tenido la oportunidad de encontrar nuevos socios en materia de inversiones en energía” y agregó: “esta es una primera señal de cómo el gobierno de Milei, por no aceptar una un patrón de vinculación que se abriera de los intereses de Occidente, dejó pasar una oportunidad importante para relacionarse con otros con otros países”.
Toffoli analizó también que “algunas cuestiones que tienen que ver con la puesta en riesgo de dos de las relaciones más importantes y estratégicas que tiene Argentina, una con Brasil y otra con China, las primeras decisiones concretas fueron también en consonancia con esta ideologización extrema de las Relaciones Exteriores”. En cuanto a Brasil, Toffoli explicó que "hoy lo concreto es que Argentina no tiene embajador en Brasil, no tenemos un representante más que los cónsules y por otro lado lo que tiene que ver con lo simbólico, Milei invitó a su asunción a Jair Bolsonaro y no a Lula da Silva”.
El analista explicó que “lo mismo pasa con China, sucedió algo muy extraño. Argentina que hoy por hoy tiene en China su principal socio comercial, tuvo una visita de Agustín Romo, que es una persona cercana al presidente Milei, a la oficina de Comercio de Taiwán en donde se le donó Argentina 300 cajas navideñas y a partir de eso China volvió a exigir el pago por el Swap de monedas que había cerrado con el gobierno de Alberto Fernández hacia fines de su gestión. La restricción externa, las relaciones comerciales y la oportunidad es de inversiones y de posibles nuevos mercados, se ven se ven muy condicionados por esto posicionamientos puramente ideológicos porque relacionarse o acercarse a Taiwán no puede tener ningún tipo de beneficio para la Argentina, de hecho China no es un actor que mida sus relaciones en cuanto a lo comercial o incluso a lo político por cuestiones ideológicas”.
“Teniendo en cuenta las dificultades macroeconómicas que tiene Argentina que están muy determinadas por la restricción externa y por el frente externo, todas estas decisiones también van aportando a que las herramientas cada vez sean menos en materia de política exterior para poder subsanar esa situación”, valoró Toffoli.
En el caso de Colombia, Toffoli explicó que Milei “de la nada llamó comunista y asesino a otro jefe de Estado, Gustavo Petro, creo que eso daña la relación bilateral”.
En cuanto a Uruguay Milei le cedió que pueda dragar el canal de Magdalena que es el que entra al puerto Montevideo, que era una disputa sobre las aguas territoriales compartidas y ahora el puerto de Montevideo tiene muchísimas más ventajas comerciales en términos logísticos que los puertos argentinos.
Por otro lado, en cuanto a la situación de violencia que atraviesa Ecuador, recordó que “la canciller Diana Mondino llamó a los a los narcotraficantes como terroristas socialistas, volviendo a poner el tema ideológico en una cuestión de seguridad que poco tienen que ver quizá con la ideología y los grupos ligados al crimen organizado no tienen una reivindicación política como sí podía pasar en otros momentos de la historia en otros países, pero en Ecuador no pasa esto”.
“Entonces creo que si el gobierno sigue en esta línea de ideologizar al extremo sus vínculos con los otros países, no solamente se ven lesionados los intereses argentinos, sino que también va a poder aportar poco Argentina en lo que tiene que ver con la resolución de los problemas comunes y esto conduciría a un aislamiento Argentina en términos de integración latinoamericana en pos de alinearse a Israel y a Estados Unidos”.